15.5.12

OVIDIO WAPPENSTEIN

Entrevista e investigación
José Martín Sotomayor & Nataly Revelo
Noviembre 2011/Mayo 2012




Citas

“A mí siempre me interesó el dibujo per se. Yo me dediqué durante una buena temporada exclusivamente al arte; pintaba cuadros con distintas técnicas y de ahí empezó toda la relación del dibujo y la arquitectura”.

“A mí siempre me ha gustado viajar a distintas partes del mundo. La Arquitectura se convierte en un tema importante para los que viajan”.

Sobre el material

“Donde hay posibilidad de exhibir el material natural, me ha gustado usar el hormigón a la vista; pero no necesariamente es una norma”.

“El hormigón a la vista ha sido una temática muy importante, y en general el acabado a la vista”.

“El hormigón tiene su carácter y su dureza en edificaciones grandes y creo que es bueno el acabado”.

“El hormigón a la vista no es más barato; todo lo contrario, resulta más caro, porque hay que escoger el equipo de encofrado, el tipo de madera que se usa para el encofrado [...], [y decidir] qué formas y dibujos tiene para darle un nuevo carácter".

“[Un ejemplo de acabado a la vista lo tenemos en esta casa;] el usar el ladrillo sin enlucido nos da una textura que a mi juicio es interesante; es un juego de la luz y la sombra que le da un carácter diferente”.

“No uso muchos colores en los edificios, sino blanco y punto, o el material a la vista; si alguien quiere trabajar sobre eso, que lo haga, pero con cuidado y con un poco de criterio que a ratos es difícil de conseguir”.

Sobre la luminosidad

“En Quito tenemos este sol fenomenal, pero no se lo usa mucho en las obras arquitectónicas”.

“El arquitecto debe tomar en cuenta que el sol juega un papel muy importante pues nos da luminosidad”.

“El sol juega un papel fundamental en la arquitectura de cualquier país del mundo”.

Sobre el espacio público

“[Los espacios públicos en mis edificios en altura] son espacios grandes en los que se puede jugar más”.

“La idea de generar un espacio para el público es importante. Lamentablemente, no se pueden hacer muchas cosas en ese sentido porque hay una problemática en nuestra cultura; a veces los edificios sufren abusos por parte de los usuarios mismos, de los visitantes y de quienes pasean por el edificio”.

Sobre el cliente

 “A veces el cliente no ha estado a favor; ha sido una lucha un poco importante pero no siempre ganamos en la lucha”.

"El referente más importante es el usuario”.

“El usuario es el que manda en cuanto a dar [forma a los] espacios; [de manera] que sean usados adecuadamente para [una] función específica”.

“Hay que entender bien quién es esa persona y conversar con ella, cuáles son sus inquietudes, no imponer, y si lo hacemos, que sea con mucha sutileza para que el cliente no se sienta agredido”.

“Hay que pensar en los usuarios que van a estar todos los días en los espacios; hay que crear espacios que sean amigables, que faciliten la gestión que la persona quiere hacer, espacios que no sean desagradables para la función que se va a dar ahí".

Sobre el estudiante

“A veces hay esa idea de que ya terminé la facultad, pero no continúan [actualizándose]; por ello el recibir revistas es una manera de seguir aprendiendo y viendo lo que se hace en otras partes del mundo […]. Cuando uno ha superado ciertos niveles puede criticar, pero eso no impide que uno esté mirando lo que está sucediendo en el mundo, siempre acordándose de que estamos en Quito, Ecuador, a tales alturas, con ciertos niveles culturales y una cierta manera de vivir que no es la misma [de otros lugares]”.

“Es importante estar al día en lo que está pasando, esto no quiere decir que vamos a copiar, pero puede haber influencias y eso es bienvenido”.

Sobre la Arquitectura

 “La Arquitectura es la creación de espacios para las distintas funciones que el ser humano desarrolla”.

“No se acaba el conocimiento arquitectónico el momento en el que uno se gradúa de arquitecto. Yo creo que ahí recién empiezan las cosas; el cómo puedo aplicar lo que me enseñaron y en ese sentido hay una responsabilidad bastante importante del arquitecto”.

“La Arquitectura realmente es una pasión y eso es válido para cualquier otro oficio o profesión".

“Emocionarse con el oficio; no hacerlo por hacer plata, eso es relativamente fácil creo yo, aunque los resultados a veces son pésimos, pero creo que es dar más allá del honorario. El oficio de la arquitectura es crear”.

Entrevista:
José Martín Sotomayor


Eran las 11 de la mañana cuando llegué a la residencia del arquitecto Ovidio Wappenstein. Esperé unos  minutos escuchando sus pasos que, lentos, bajaban desde el comedor, ubicado en el tercer piso de una alta casa. 

Ovidio Wappenstein comenzó sus estudios en la Universidad Central del Ecuador. A mitad de empezada la carrera decidió viajar al continente europeo, en donde conjuntamente con arquitectos de prestigio y reconocidos internacionalmente pudo trabajar en temas relacionados con la planificación urbana, específicamente en Londres, Rotterdam y Weenedall, ciudades que fueron destruidas luego de la segunda guerra mundial. Luego de esta enriquecedora experiencia, regresó a Ecuador, continuó con sus estudios y obtuvo su título profesional en la Universidad Central.

Su interés estuvo siempre ligado a las artes plásticas, a la pintura, pero decidió estudiar arquitectura.

A la pregunta de si existe una forma de hacer arquitectura, Ovidio responde que no existe un camino a seguir y que lo importante es hacer las cosas bien y con compromiso; que debemos ser arquitectos del tiempo que nos tocó vivir y no copiar -peor aún replicar- arquitecturas del pasado. "Si hacemos un edificio hoy", dice Ovidio, "debe verse como hecho hoy y no como uno de hace 50 años. Además, debemos actuar y hacer las cosas de manera práctica". Con respecto a cuál es la forma más adecuada de intervenir en un contexto histórico, responde que lo más importante es tomar en cuenta la escala y la proporción, así como la relación entre las opacidades y las transparencias, los sólidos y los vanos. 

Ovidio considera que el arquitecto debe tomar siempre en cuenta el espacio público a la hora de diseñar: las plazas y plazoletas, el entorno inmediato, los espacios ligados directamente con el nuevo edificio.


Con respecto a la relación entre forma y función, Ovidio considera que no basta con que un edificio se vea estéticamente bien, que sea "bonito" por fuera; considera que las funciones deber reflejarse en la arquitectura y que es importante cumplir con ellas. 

Ovidio recuerda con especial afecto tres de sus obras ubicadas en la ciudad de Quito: la Coorporación Financiera Nacional, el Hotel Hilton Colón y el Edificio del COFIEC. Todos estos edificios comparten algo en común: la buena relación que tiene el volumen arquitectónico con su entorno inmediato y un adecuado tratamiento del espacio público.


La opinión que tiene Ovidio de la educación del arquitecto en Ecuador es sombría: "No existe educación. Los talleres de arquitectura ya no son talleres. El estudiante de arquitectura ya no profundiza y los maestros no incentivan a los estudiantes".


A los jóvenes les diría que "cada quien conoce su camino. Lo importante es batallar con esta lucha diaria".

Archivo

Maqueta proyecto concurso Iglesia de la Dolorosa 

Maqueta proyecto de tesis: Museo de Arte
Ovidio Wappenstein y Juan Espinosa Páez

Boceto Edificio COFIEC, Quito 1970. 
Foto: Revista "Miradas a la Arquitectura Moderna en el  Ecuador".




Edificio COFIEC en la actualidad. 
Foto: José Martín Sotomayor, 2011


Vista Exterior Edificio COFIEC
Fotos: Nataly Revelo, 2012


Materialidad Edificio COFIEC
Fotos: Nataly Revelo, 2012









Ingreso Edificio COFIEC
Fotos: Nataly Revelo, 2012












Vestíbulo Edificio COFIEC
Fotos: Nataly Revelo, 2012


Interiores en la actualidad, Edificio COFIEC
Fotos: Nataly Revelo, 2012














Edificio Corporación Financiera Nacional, Quito 1977.
Foto: Revista "Miradas a la Arquitectura Moderna en el  Ecuador".



Edificio Corporación Financiera Nacional en la actualidad
Foto: José Martín Sotomayor, 2011.


Corporación Financiera Nacional en la actualidad
Fotos: Nataly Revelo, 2012




Ingreso Corporación Financiera Nacional en la actualidad
Fotos: Nataly Revelo, 2012

  
Hotel Colón, Quito, 1965-1978.
Foto: Revista "Miradas a la Arquitectura Moderna en el  Ecuador".















Hotel Hilton Colón en la actualidad, Quito
Fotos: Nataly Revelo, 2012


EnlacesTectónica brutalista en Quito: Milton Barragán y Ovidio Wappenstein, Geovanny Paula Aguayo y Jaime J. Ferrer Forés, 2013

.





11.5.12

DANIEL MORENO FLORES

Entrevista e investigación
Santiago Vaca
Abril 2012



Citas

"[En el] cómo hacer, o [en el] tener abierta la mente y poder crear lo que uno quiera, me ha ayudado el [trabajar] con el Arq. José María Sáez".

"No es sólo [el] cómo se hace, si no todos los pensamientos [que están] detrás [lo que cuenta]".

"Hay que establecer un punto medio. Se trabaja para la gente; en base a eso, los fines económicos a veces deben verse relegados".

"Me doy mucha libertad al momento de hacer; intento jugar con los recursos que tengo a la mano".

"Me interesan la experimentación y el lograr hacer cosas interesantes, propositívas y con pocos recursos".

"Busco formas de funcionamiento en base a imaginaciones y resoluciones propositivas".

"Hay que saber promocionarse en las primeras conversaciones, es súper complicado [hablar] y que te entiendan".

"He sacado provecho de [los] recursos, [pienso] que todo lo que esté a mi alcance, todo lo que esté en mis manos, [puede] transformarse en arquitectura y espacio".

"Siempre hay espacios para proponer y hacer arquitectura social".

"Sí bien ocupo materiales [de] bajo costo, se [compensan] con la mano de obra".

Ensayo crítico

"Daniel Moreno Flores: Contextualización, revisión y apuntes de su obra".
Autor: Juan Carlos Villacrés

Proyectos

Medalla de Oro, Quito, 2008
"La tesis de grado la disfruté muchísimo, fue un proyecto con una posición de vida, de relación entre individuos y arquitectura tomando en cuenta la participación activa del usuario mediante el juego. Este trabajo de Fin de Carrera ganó el Premio Nacional Medalla de Oro en la categoría Diseño Arquitectónico en la XVI Bienal Panamericana de Arquitectura de Quito 2008 y posteriormente participó en el concurso de las mejores tesis del mundo Archiprix Montevideo 2009".





































Sin dinero, Quito, 2010

"He tenido la oportunidad de hacer proyectos personales de rehabilitación, que han sido realizados a un costo bajo, determinante que ha hecho que potencialice el diseño con el desuso".












2+2+, Quito, 2010












Casa Mar, Manabí, 2010












Taller, Quito, 2009

































Mike, Quito, 2012








Casa Algarrobos, Quito, 2011-2012
Colaboración con el Arq. José María Sáez





































Alojón, Quito, 2009-2010
Colaboración con el Arq. José María Sáez












Boca del Lobo, Quito, 2008
Colaboración con el Arq. José María Sáez












Sincretismo de Luz, Quito, 2009
Colaboración con el Arq. José María Sáez











Yasuní, Orellana, 2011













Primogénito, Quito, 2012











Quilotoa, Cotopaxi, 2012
Colaboración con los arquitectos Jorge Javier Andrade Benítez, Javier Mera Luna














SENDERO Y MIRADOR EN LA LAGUNA DEL QUILOTOA, COMUNIDAD SHALALÁ
Texto: Ana María Durán Calisto
Autores: Jorge Javier Andrade Benítez, Javier Mera Luna, Daniel Moreno Flores. Promotor: Ministerio de Turismo del
Ecuador
Colaboración: Manuel Galárraga-María Paz Villagómez-Diana Callejas-Christian Rea-Natalia Dueñas-Juan Carlos Cisneros-Andrés Llanos
Ubicación: Quilotoa, Shalalá, Zumbahua, Provincia de Cotopaxi, Ecuador


El valor de un Mirador

Un sencillo gesto que cumple con su función: facilitar la contemplación de la Laguna Quilotoa, sin irrumpir en el entorno. Un voladizo-puente para navegar sobre la fantasía del lugar, que no deja de ser el verdadero protagonista de la intervención. Poético, simple, silencioso; de materiales afines con la montaña, sin pretensiones; frágil, esta arquitectura surfea en una cresta de Los Andes ecuatorianos; fulcro en el anillo del cráter de un volcán activo, en cuyo centro se ha empozado el lago turquesa de los indígenas del “quiru” (diente) “toa” (reina), acostumbrados a convivir con las tonalidades glaciares de sus minerales fosforescentes. Ha sabido posarse en un páramo, cuyas flores son “cauchosas” o lanudas, retraídas de tanto frío; y donde los troncos de árboles del género polylepis se deleznan incesantemente. Una escalera-anfiteatro desciende hacia la superficie turquesa del agua. Agua glaciar. El piso se rompe para posarse naturalmente sobre la pendiente de la roca. La vista que ofrece está enmarcada por otro puente, de menor escala y transversal: el elemento que no se desfonda y permite transitar además de encuadrar y elevar. El vidrio no posee más estructura que su grosor para no interrumpir la relación entre el observador y el lago ni entorpecer las vistas. Planos transparentes. ¿El material predominante? La madera… a pesar de estar a la intemperie y demandar un enorme esfuerzo en mantenimiento. ¿La respuesta? La comunidad la cuida. El puente mirador está ubicado cerca de Shalalá y su iniciativa de turismo comunitario. Todos ganan: las comunas de Shalalá y Zumbahua, el gobierno que financia la obra y el diseño que se beneficia de una propuesta alternativa y respetuosa con el entorno, tan atípica en un país que cementa sus paisajes de manera violenta. Aquí, los planos de una geometría abstracta se insertan en la tierra, como cuchillas suaves, para proveer fondo a la vegetación y la roca, contrastando con sus formas “sigse”, sin perturbarlas. Un entablado continuo recubre la estructura de acero: la cercha modular de un puente que nunca llega a besarse con su gemelo, proyectándose, invisible, desde el otro lado del agua. La repetición de dos módulos inclinados en la misma dirección rompe con la simetría. La lógica constructiva es una de despiece, un juego de niños, un kit que se transporta con facilidad a la montaña y se ensambla en poco tiempo. Las duelas de la piel se intercalan en las juntas como dientes o dedos entrelazados: costuras bien punteadas. Se oculta la cercha; se expresa el plano. No hay puente sin anclaje. Este se amarra a la montaña en varios puntos y se apoya sobre un contrafuerte. Casi todo es removible y se puede revertir. Nos hace imaginar la marca que dejaría en el tiempo si pierde su piel. Huesos de acero oxidado. Carcasa del vértigo. Tan simple la estructura. Tan simple el sistema constructivo. Tan bello el resultado: te conduce al aire, a la bocanada de frío. Un puente proyectado para mirar, no para cruzar. Para respirar, no para transitar. Puente observatorio. Infraestructura poética. Boca que se abre para ser cuadro, arte, cultura en la yuxtaposición de lo que es y lo que se sabe, para tragarse el horizonte.           

Ante la Majestuosidad, una inclinación.

El valor de este mirador rebasa los valores de la arquitectura que posee y en grado justo.

Hospital San Lázaro, Quito, 2011


9.5.12

IGOR MUÑOZ

Entrevista e investigación
Mishell Gavilanes Dávila
Mayo 2012





Arq. Igor Muñoz from Mishell on Vimeo.


Citas


“Seamos lo menos consumidores […], seamos lo menos ensuciadores […], tratemos de que la huella de carbón que depende de nosotros sea lo mas pequeña posible”.

“El arquitecto esta capacitado para dar soluciones”.

“Somos unos grandes improvisadores frente a soluciones espaciales”.

“Para poder entender las partes del diseño, de la creatividad, se tiene que ir también a lo micro, comenzar por analizar la forma”.

“Uno encuentra cosas con las que se identifica y [con ellas] tiene un proceso creativo”.

“La reutilización de conceptos crea una cierta lectura, un lenguaje propio desde afuera”.

Archivo















Laboratorios Criminalística, Quito, 2009





Restaurante Carmine, Tumbaco, 2006








Residencia Bucheli, Tumbaco, 2008


Residencia de los árboles, Tumbaco, 2008



























Residencia Uquillas, Tumbaco, 2007




Residencia Muñoz, Tumbaco, 2007
















































































































Oficinas Law, Quito, 2002


"Denuncia", papel quemado sobre piedra, 1.70 cm. de altura, 1994

"Conciencia atrapada", madera tallada y quemada, 2.50 * 1.20 cm. 1994

"Naturaleza muerta", madera tallada y quemada, 3.20 cm. de altura, 1994

"Involución"; madera tallada, ensamblada y quemada; 1.75 cm. de altura, 1994